Olivia y Finn son polos opuestos; ella es estudiosa, artista y buena chica y él es un animal fiestero rebelde sacado de rehabilitación. Pero al acostarse la noche antes de que el padre de Olivia se case con la madre de Finn, ellos se dan cuenta que tienen algo en común: están obsesionados el uno por el otro. ¿Podrá Olivia poner a un lado lo que siente por su hermanastro malote?